martes, 16 de agosto de 2011

Un segundo suspiro




El fin de la vida, he oído exclamar a mucha gente. Yo prefiero llamarle un segundo suspiro. Al trascender lo físico se genera un proceso de creación tan hermoso que escapa de nuestra imaginación. Dicha infinita es lo que le espera, a cualquiera ser, del otro lado del escenario, cuando se apagan la luces y dejas de actuar, cuando decides que es hora de quitarte la máscara. El resultado será el mismo para todos los seres vivos, sin importar que papel hayan jugado en esta vida, sin importar la calidad de su actuación, sin importar si se perdieron o no en su papel, después de todo es parte de la ilusión.

 La entidad que experimenta la “muerte”, es capaz de ser consciente, de cualquier tipo de creación, como realidades alternas, mundos de ensueño, lo imposible se vuelve cotidiano. El tiempo deja de percibirse como una estructura lineal y la libertad se adueña de nuestra experiencia.  Es una experiencia llena de creación, tan real como el día a día, tan real como el escritor que crea una historia, como el actor que se desdobla para darle vida a un personaje, como el compositor que crea una estrofa musical, como el vientre materno que desarrolla  una nuevo milagro. La creación es tan cierta que solemos negarla, negamos ese poder mágico que alberga en cada uno de nosotros, negamos que somos los creadores de nuestra historia, de nuestra pequeña obra. Eres libre de aceptar lo que eres, eres libre de hacer lo que te plazca, eres libre de ser o de no ser, eres libertad plena, eres amor.


2 comentarios:

  1. El fin de la vida: Sinceramente una muy hermosa reflexión, me gusto mucho, deja que pensar, pues solo esta en nosotros creer que somos y seremos los creadores de nuestra historia.

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  2. Muchas gracias. Encantado de tenerte por aquí.

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